PREGUNTAS ONLINE

El proceso del trasplante capilar consiste en seleccionar las unidades foliculares idóneas en la zona donante del paciente (nuca), extraerlas e implantarlas folículo a folículo en la zona receptora. No es invasivo, no deja cicatrices y tras 48 horas se puede volver a la vida cotidiana. Es una solución eficaz y definitiva pero es un proceso que lleva su tiempo, alrededor de los 12 meses, para ver los resultados definitivos.

A dia de hoy existen 3 técnicas en el mercado:

• FUSS o “técnica de la tira”: en esta técnica se extrae de la parte posterior de la cabeza una tira de cuero cabelludo de hasta 20 centímetros de longitud por 1 de ancho, lo que deja una cicatriz que se oculta bajo el pelo restante.


• FUE o “extracción de unidades foliculares”: es una técnica no invasiva ni deja cicatriz ya que se extraen las unidades foliculares una a una mediante un micro bisturí de alrededor del 1 mm de ancho.


• MFZ4D®: es la técnica más novedosa y es la que nosotros utilizamos en nuestra clínica. Se extraen la unidades foliculares una a una como con la técnica FUE, pero el micro bisturí es mucho más pequeño (0.7-0.8 mm) y no es de cuchilla normal si no de punta de zafiro, la cual nos permite conseguir más densidad y la incisión es mucho más limpia, por lo tanto se reduce el tiempo de cicatrización ademas de no dañar tanto el pelo colindante.

Es una técnica de trasplante mínimamente invasiva que se realiza con anestesia local y no deja cicatrices. Es la técnica más avanzada en el mercado. Consiste en la extracción individualmente de las unidades foliculares que nosotros seleccionamos que se encuentran en la zona posterior de la cabeza, dejando una pequeña herida que curara espontáneamente sin cicatriz visible.

No, es una cirugía menor, es decir se realiza con anestesia local y no tiene ningún tipo de riesgo. Es ambulatoria, el paciente entraría por la mañana y por la tarde ya estaría en su casa. Solamente se necesita 48 horas de reposo relativo. A las 48 horas ya podría incorporarse a su rutina diaria, siempre y cuando haga caso a las pautas que se le explicarán antes del trasplante.

Lo más recomendable es rasurar por completo la cabeza. Sin embargo, existe la posibilidad de una técnica de rasurado parcial especifica en la zona donante, sin necesidad de rapar al paciente totalmente.

El trasplante es un trabajo muy minucioso que lleva mucho trabajo y una media de 8 horas son las que normalmente se tardan desde el rasurado, diseño, sesión fotográfica, cirugía, vendaje y pautas del después.

Sí, una de las razones por la que más nos despuntamos del resto de Clínicas es precisamente los resultados naturales que conseguimos con nuestros injertos. Como decimos, un buen injerto es aquel que no se vea artificial, un buen diseño junto con una densidad óptima dentro de lo natural es la calidad del injerto capilar.

Lo más importante es empezar a cuidarse contra la caída del pelo, se decida o no hacerse un injerto capilar. Para ello tenemos una serie de tratamientos específicos que personalizamos según las necesidades de cada paciente. Y si hablamos del pre operatorio, no son necesarias grandes pautas, solo que el mismo dia de la cirugía no se consuma ni cafeína ni drogas de ningún tipo.

Es muy importante que se trate el cabello propio que uno tiene, ya que ese pelo si no se cuida se perderá con el paso del tiempo. El injertado no tiene problema puesto que está extraído de una zona donde genéticamente no tiene el mismo ritmo de caída que en el resto de la cabeza. El tratamiento estrella actual para frenar la caída es el Plasma Rico en Plaquetas (PRP). Este tratamiento ademas de frenar la caida desde la primera sesión, logra rehabilitar aquellos folículos que están en fase de envejecimiento permitiendo que vuelvan a producir pelo con mayor calidad y resistencia.

Después del injerto capilar le enseñaremos que cuidados y como tiene que lavarse la cabeza para que cicatrice de la manera más rápida posible. Para ello, parte del equipo estará con usted explicándole paso a paso mientras nosotros realizamos el primer lavado y así intentar eliminar el máximo de costras que pudiera tener después del injerto capilar.

Sí, durante los primeros 15 días se puede llevar gorro/ a o sombrero de forma holgada para proteger la zona del injerto mientras el periodo de cicatrización, para que no se produzca ningún tipo de infección o cualquier problema superficial con la contaminación atmosférica.

No, es una cirugía ambulatoria, es decir, se entra por la mañana y se sale por la tarde. No tiene que pasar noche en el hospital, podrá irse a dormir a su casa sin ningún problema.

Una media de 10-15 días, dependiendo del proceso de cicatrización de cada paciente.

No, durante los primeros días hasta que se realice el primer lavado no se puede tocar el injerto. Una vez hecho el primer lavado, podrá tocarse el injerto para lavar la zona y siguiendo las pautas que le haya marcado el equipo médico. Durante los primeros 15 días se tiene que tener cuidado para que el proceso de cicatrización sea el más óptimo posible.

Durante la intervención no hay ningún tipo de riesgo, lo único que puede sentir el paciente es cansancio postural por el tiempo que lleva la cirugía, solo eso.

Para nada, es una cirugía menor lo cual no se necesita ninguna transfusión.

No, el pelo injertado se extrae de la zona posterior de la cabeza que genéticamente no se cae con el paso del tiempo, si lo que se padece es alopecia androgénetica. Lo que hay que tener en cuenta es que el resto del pelo seguira cayendo a su ritmo con el paso del tiempo, es por eso que recomendamos utilizar algún tipo de tratamiento anticaida real para mantener ese pelo y que la alopecia no vaya a más y asi mantener la densidad y resultado obtenido tras el transplante capilar.

No, si sigue las pautas que el equipo médico le explicara no habría ninguna reacción. Una de las pautas que se le recomendara será que las siguientes noches no se duerma completamente acostado sino semiacostado para que la anestesia no baje a la frente y provoque hematoma en los ojos.

Si, de hecho es lo que suelen hacer los pacientes. Se hacen el injerto, están 48 horas en casa hasta el lavado y posteriormente se van de vacaciones. Durante los primeros días de las vacaciones, el paciente tendrá que tener cuidado con la zona del injerto y evitar sumergir la cabeza en la piscina o en la playa, por lo demás podrá realizar una vida bastante normal.

El crecimiento de los injertos implantados se situa entre el 90-95% sin dejar cicatrices.

No es dolorosa, es una cirugía muy poco invasiva y se utiliza anestesia local.