Con este tratamiento (PRPF) conseguimos aprovechar el grandísimo potencial regenerador de los tejidos de las plaquetas. Se usa en medicina deportiva, odontología y traumatología ya desde hace años y sus resultados, tanto rápidos como eficaces hicieron que esta técnica se introdujese en otros campos como la medicina estética o cirugía capilar.
Para realizar el tratamiento de plasma rico en plaquetas (PRPF), necesitamos obtener el plasma de la sangre extrayendo una pequeña cantidad del paciente. Después someteremos esta sangre aun proceso de centrifugado propio de nuestra clínica con el que conseguiremos aislar las fracciones plasmáticas más ricas e idóneas para nuestro tratamiento de plasma.
Una vez recolectadas, aplicamos un poco de frio o pequeñas dosis de anestesia por las zonas del cuero cabelludo afectadas y las insertamos mediante unas microinyecciones bajo el cuero cabelludo.
Al ser la propia sangre del paciente, no existe riesgo de rechazo, transmisión de enfermedades o alergias y al tratarse de una técnica apenas invasiva no necesita recuperación posterior por parte del paciente el cual vuelve a su vida normal según finalice la sesión, aunque sí que se recomienda no realizar ejercicios que hagan sudar la zona tratada, masajear o aplicarle calor durante las primeras 24h.
La duración del tratamiento depende del tipo de PRPF que se aplique, nosotros tenemos dos tipos; el PRPF normal y otro 7 veces más potente.
